Porsche Boxter. Cada vez más cerca

Cuando vi por primera vez el nuevo Boxster en una foto espía hace unos meses, no me pareció gran cosa. Era una pequeña evolución sobre lo que ya se conocía.

Pero ahora que lo he visto ya terminado y dispuesto para comercializarse, me a sorprendido muy gratamente.

El Boxster siempre a sido la alternativa más barata al 911 cabrio, porque la alternativa coupé nos la encontrábamos con el Caymán, que me parecía mucho más bonito y bastante mejor rematado e incluso; siempre me a parecido más coche, aunque compartían segmento.

Era un coche perfecto para "ladies" adineradas que iban de compras por la avenida de Salamanca en Madrid o a tomar unas copas con las amigas en cualquier local de moda de Saint Tropez o Puerto Banús, pero no para alguien que disfruta conduciendo por una carretera revirada a cielo abierto. No me malinterpretéis; seguía siendo un Porsche, pero era el menos potente y más descafeinado de toda la gama.

Ahora parece que se han cambiado las tornas. El nuevo Boxster sigue siendo la alternativa más barata, pero su diseño se a masculinizado y se a tornado bastante más agresivo que el anterior, por lo que automáticamente se convierte en un serio candidato a la compra por parte de los "Gentleman Drivers", que ya no tendrán que preocuparse porque los demás piensen que le a tomado prestado el coche a su mujer.

Tiene unas líneas más fluidas, es más ancho entre vías y hay mayor distancia entre ejes, es más bajo, con la consiguiente mejora sobre el centro de gravedad; y en conclusión; es más divertido de conducir. El punto de inflexión para que éste coche sea mucho más agresivo y atractivo que el modelo precedente, han sido las puertas. Parece una tontería, pero en anteriores ocasiones, a compartido las mismas que empleaba el 911, por lo que el diseño quedaba condicionado por esta situación.

Al tener libertad de creación, los diseñadores han dibujado unas puertas que en cierta medida le acercan a las que en su día utilizaba el extinto Carrera GT. Las tomas de refrigeración del motor situadas justo detrás son marca de la casa, pero en ésta ocasión funcionan las dos y no solo la de la parte derecha, como ocurría con los anteriores Boxster.

Los pilotos traseros están muy logrados, son muy originales y se funden en diseño con el alerón posterior retráctil por medio de un botón situado en la consola central. Los delanteros han tomado una forma más vertical que lo que venía siendo habitual, y junto con otras pequeñas pinceladas, estamos hablando de un coche que ha ganado muchos puntos y que cada vez más, se acerca en posibilidades a su hermano mayor 911.

En el interior nos encontramos con una ergonomía excepcional, una terminación y ajustes dignos de la casa alemana, unos asientos que sujetan muy bien el cuerpo y un cuadro de mandos con todo lo necesario y la información indispensable para disfrutar conduciendo. Ahora la mayoría de los botones se agrupan alrededor de la palanca de cambios, solución que procede de la experiencia y el diseño del interior del Porsche Panamera.

La capota es totalmente eléctrica y ya no hace falta soltar ningún anclaje en el perfil del parabrisas para poder replegarla. Tarda tan solo 9 segundos en abrirse completamente y se puede hacer en marcha si no superamos los 50 Km/h. Con ella cerrada, el coche pierde esa belleza natural que tiene y además se dice, que no ajusta todo lo bien que debería, aunque gracias a los nuevos materiales empleados, absorbe 2Db más de los ruidos que proceden del exterior.

También tiene un maletero aparente para ser un deportivo biplaza y motor central. Cuenta con dos maleteros, el posterior con 130 litros, va ubicado detrás del motor y el delantero que tiene 150 litros, con lo que en conjunto suman un total de 280 litros de capacidad.

La gama de motores se compone tan solo de dos propulsores; el Boxster "a secas" que monta un 2.7 con 6 cilindros tipo Bóxer y tiene 265cv y el Boxster S que monta un 3.4 con 315cv. Los dos son atmosféricos y en Porsche han declinado la utilización de ningún tipo de sobrealimentación.
Para reducir consumos se han empleado a fondo en otros medios como por ejemplo, la reducción del peso, la aerodinámica y sistemas de ahorro de combustible en marcha, como el circular "a vela". Consiste en dejar el coche en punto muerto cuando dejamos de acelerar y aprovechar así la inercia de marcha del coche.

Ahora que lo pienso; yo no lo he comprobado, pero ¿cuáles son las consecuencias si estamos aprovechando la retención del motor bajando un puerto de montaña?. Habría que preguntarlo.

Aun así; es relativamente fácil registrar consumos de tan solo unos 9 l/100 Km a velocidades legales y con una conducción suave.

El equipamiento de serie es suficiente, pero realmente necesitas redondear el coche con opcionales; bastante caros, por cierto. Como imprescindibles, podríamos contar con el cambio automático PDK ya que de serie cuenta con una transmisión manual de 6 relaciones. También sería interesante adquirir el "Porsche Torque Vectoring" que le hace más ágil en las curvas y mejora la tracción en grandes aceleraciones o el sistema de suspensión adaptativa PASM, aunque en su posición más dura sea un poco seca.

También puedes contar con frenos carbocerámicos, pero los que trae de serie son más que suficientes para detener al Boxster con total garantía, y su precio se dispara hasta los 8.160 euros. También puedes montar llantas de 20" que cuestan más de 1.500 euros, pero las que monta de serie de 19" son más efectivas y con ellas el coche consume menos. Pero lo que más me llama la atención, es que también tienes que pagar 850 euros por instalar el climatizador, y creo que para un coche de estas características y precio, es un auténtico abuso.

Por cierto y hablando de precios; el Boxster parte de unos 52.800 euros y el del Boxster S desde unos 65.500 euros, lo cual les hace todavía inaccesibles para la mayoría, pero acerca la gama más auténtica de Porsche hacia unos pocos que no se quieren gastar más de 100.000 euros en un deportivo, pero que si ansían un coche para disfrutar conduciendo.

Si realmente tienes ese dinero (que no es tanto), y deseas conducir un deportivo puro, con motor central, un gran reparto de pesos, tracción trasera, una estética (ahora sí) agresiva y una potencia más que suficiente a cielo abierto y con la melodía de un motor de 6 cilindros de fondo; éste es tu coche.