Range Rover Evoque. El inusual

El mundo de los todoterreno y SUV ha experimentado un crecimiento constante en sus ventas durante mucho tiempo en este país y, a pesar de la crisis mundial que nos afecta a todos, las ventas se han mantenido.

Ese fenómeno ha sido aprovechado por varias marcas para presentar sus TT y SUV con más o menos éxito. Pero si de verdad hay en el mundo una marca que sea especialista en este tipo de coches, esa es Land Rover.

Vale, también son legión los que defienden a una marca como Jeep, con unas aptitudes "offroad" más que demostradas y una gran imagen de marca. Pero realmente son muy al gusto norteamericano en cuanto a diseño y muy espartanos en su interior, pese a poseer una gran carga tecnológica. Dejemos la contienda en un empate técnico; Jeep es a E.E.U.U, lo que Land Rover es a Europa.



Pero la marca del Reino Unido tiene un as debajo de la manga. Ese as es su división de productos de lujo con un punto más de refinamiento que los, ya de por si, bien rematados Land Rover. Esta división se llama Range Rover.



Cuando la marca de turismos Rover desapareció como tal, fue adquirida por un fabricante chino, pero la división de TT sobrevivió a la "quema" porque ya era una marca independiente. Aun así, los cambios económicos mundiales y las diferentes demandas por parte del gran público eran constantes y la marca fue comprada por Ford junto con Jaguar y Aston Martin.

El mundo seguía girando a una velocidad increíble hasta que llegó el "bombazo" de la economía por la dichosa crisis en donde compañías gigantescas de automóviles como GM y, por supuesto, Ford, vieron como su hegemonía se veía seriamente afectada. Por ello, tuvieron que desprenderse de algunas las marcas que conformaban su grupo automovilístico. En el caso de Ford; primero se deshizo de Aston Martin a favor de todo un especialista como Prodrive. Pero Land Rover y Jaguar, no tenían tantas "novias".

Finalmente el grupo Tata se hizo con las dos compañías, a lo que en su día yo pensé que sería el final de ambas. Pensé que una marca como Tata, especialista en coches baratos de dudosa calidad y en maquinaria pesada, casi en exclusiva para los países orientales en vías de desarrollo; iba a mantener la misma política de empresa y estas dos marcas, le iban a servir como trampolín para entrar en Europa y vender sus productos. Qué equivocado estaba, gracias a Dios.



Resulta que al final no es que hayan hundido a las dos marcas, sino que las han hecho más rentables, más atractivas y las han dotado de una tecnología puntera que para si querrían algunas marcas de mayor historia y prestigio.



En el caso de Land Rover, han rediseñado sus productos ya existentes y los han dotado de un atractivo y una tecnología digna de coches de mayor categoría. En el caso de los Range Rover, han hecho algo parecido, pero casi sin tocar nada de lo que había.

Dotaron a su buque insignia, el Range Rover "a secas", de mayor empaque y presencia, con mayores estándares de calidad y un equipamiento inapelable. Después añadieron a la gama el Range Rover Sport, para un público más dinámico y joven. La verdad es que no variaron en exceso la carrocería, aunque sí que disponía de una estética más afilada y deportiva, pero manteniendo el toque "varonil" de su hermano mayor. Ahora nos sorprenden con el hermano pequeño de la división de lujo de Land Rover; el Range Rover Evoque.



Poco ha cambiado de éste desde que se presentó como un "concept car", llamado LRX, hace ya algunos años, concretamente en 2008. Fue tal la revolución que generó aquel diseño tan futurista en todos los medios de prensa especializados y en el gran público, que no han cambiado prácticamente nada de aquel concepto inicial. De hecho, es un coche que enamora al primer golpe de vista.



Cuenta con dos tipos de carrocería; de tipo coupé y con cinco puertas y curiosamente, la versión de tres puertas es unos 1.000 euros más cara que la versión de cinco. Esto es así porque los responsables de marketing de la empresa entienden que los compradores de la versión corta son personas que van a utilizar el coche para su tiempo de ocio y no tienen previsto tener familia, así que sus necesidades (y su mayor poder adquisitivo) están a otro nivel.



Mantienen ambas carrocerías una posición de conducción digna de un compacto, pero realmente la plataforma está sobreelevada así que, obviamente, tendremos un amplio campo de visión por encima de los demás turismos.

La plataforma sobre la que está construido es la misma que utiliza el Land Rover Freelander, por lo que se convierte en el pequeño de la familia Range Rover, con 4,35 metros la versión corta y tan solo 10 mm más la versión de cinco puertas.

Puede parecer poco, pero los ingenieros de la marca han estudiado cada milímetro del vehículo para optimizar el espacio sin cambiar apenas el diseño original. Así pues, han conseguido una habitabilidad más que aceptable tanto en un tipo de carrocería como en el otro.



El "coupé" viene de serie con 5 plazas, como el de cinco puertas, y es 3 cm más bajo de techo, pero personas de más de 1,80 m de altura no tendrán ningún inconveniente a la hora de acomodarse en los asientos posteriores. El único precio que hay que pagar es una plaza central trasera sobreelevada, por lo que el ocupante de esa plaza sí que estará condicionado por la altura. Pero tranquilos; si optamos por el de tres puertas tenemos la opción de que nos instalen dos asientos individuales sin sobrecoste.

El conjunto es bastante liviano gracias a la utilización de materiales como el aluminio y el titanio para algunos paneles de la carrocería o partes del chasis y el magnesio, para elaborar el salpicadero. Además, en el interior se emplean un 16% de plásticos reciclados y un 21% de materiales naturales y renovables.

Los motores utilizados para mover a este SUV tan inusual, proceden del grupo PSA y Ford y son fruto del aprovechamiento de los antiguos acuerdos que tenían en su día, así que esos motores están más que ratificados y probados.



En diésel contará con el 2.2 del consorcio francés con dos gamas de potencias, uno con 150cv y otro con 190cv y en gasolina tendrá el enérgico 2.0 Turbo de 240cv, fabricado en la planta de motores de Ford en Valencia. En un futuro la marca no descarta variantes de hasta 300cv para morder con más fuerza en el mercado Norteamericano, pero eso se verá con el tiempo.

Los más potentes pueden llevar la caja automática de 6 velocidades, con levas en el volante y ese selector tan "mono" que emerge de la consola central, pero tan sólo las mecánicas diésel pueden llevar el cambio manual, también de seis marchas, siendo obligatorio en la mecánica de 150cv y tracción 4x2. Teniendo en cuenta que el automático, firmado por la empresa ZF y con un funcionamiento más que delicioso cuesta la nada desdeñable cifra de 3.900 euros, muchos compradores se decantarán por la versión manual tradicional. Eso si no se compran el gasolina.



Los consumos, son bastante contenidos. Sirva de ejemplo que las dos mecánicas diésel consumen tan sólo entre 5 y 6,4 litros a los 100 Km en consumo mixto, según sean el motor de 150 o 190cv respectivamente. Y en el caso de la versión más enérgica de gasolina, también es bastante frugal para las capacidades de ese motor y se conforma con tan solo 8,2 litros a los 100 Km.

Y sí, has leído bien; va ha contar con una versión con tracción delantera relacionada directamente con el motor de 150cv, pero ésta no llegará a nuestro país hasta comienzos del año 2012. De momento sólo estará disponible con tracción total y llevará, como buen Range que se precie, el "Terrain Response", que varía los parámetros del vehículo, según el tipo de firme por el que vayamos a circular: General, Césped/Gravilla/Nieve, Barro/Caminos trialeros y Arena. Además, algunas versiones también contarán con el Sistema Dinámico Adaptativo y toda esa electrónica interviene en sistemas como la dirección, la suspensión, el control de estabilidad, los frenos, la transmisión y el cambio automático.



También tiene la posibilidad de montar, como opción, el sistema de suspensiones "Magnetic Ride". Este sistema de suspensión se adapta a todo tipo de terrenos en décimas de segundo y su efectividad está fuera de toda duda. De hecho, otra versión de este tipo de suspensiones las montan todos los Ferrari que se producen en la actualidad.



El interior está muy bien acabado, con unos materiales de primer orden, una ergonomía espectacular y una gran carga tecnológica. El volante es bastante grande y puedes acceder a casi todos los actuadores desde él con los pulgares. Cuenta también con una gran pantalla central con "Dual Visión", que permite al conductor seleccionar las opciones en el sistema multimedia, mientras el copiloto está viendo una película.



Las posibilidades de personalización también serán una de las bazas con las que contará el modelo de la firma de Gaydon a la hora de captar nuevos clientes. El techo de diferente color que la carrocería, asientos delanteros deportivos, llantas de 18", 19" o 20"..., harán las delicias de los que anhelan un coche original y exclusivo, puesto que las opciones son muchas, y algunas muy caras.

Su medio natural serán las carreteras convencionales y rara vez, el cliente de este tipo de vehículo se internará en caminos en mal estado. Pero por si acaso, está preparado para afrontar ciertas rutas "offroad" con mayores garantías que, por ejemplo, rivales como el inminente Audi Q3 o el BMW X1.



Serán algo más caros que otros componentes de la misma categoría, pero la exclusividad se paga y los precios partirán de los 33.600 euros de la variante básica de 150cv y tracción delantera, hasta los 52.100 euros que costará la versión de gasolina más equipada. Por otra parte los acabados serán dos: Dynamic y Prestige.

Creo que será un coche con una gran aceptación. De hecho, ya tiene unas 18.000 reservas en firme por todo el mundo, !!!y eso sin ver ni siquiera un anuncio publicitario!!!.

Apto para jóvenes padres de familia, como para personas dinámicas y deportistas con alto poder adquisitivo, que quieran algo totalmente diferente a lo establecido.

Probablemente, la mayoría de los que han reservado esas 18.000 unidades, sean clientes nuevos en la marca. Y han venido para quedarse.