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Citroën C4 Picasso. Mucho "Tecno" y mucho "Space".

!!Por fin hablo sobre Citroën y no sobre su gama de pseudo-lujo DS!!. A principios de año se filtraron las primeras imágenes del que iba a ser el sustituto del monovolumen super-ventas de la marca gala con una acogida bastante importante por parte del público y unos meses más tarde, aquí tenemos el producto final que no varía mucho de lo que vimos en aquel "concept" denominado Technospace.


La imagen exterior es realmente espectacular y llama poderosamente la atención, sobre todo la parte frontal que ahora incorpora unas luces de iluminación diurna elevadas y diferenciadas de los faros principales que se prolongan en la misma línea de los cromados de la parrilla delantera. Aportan al nuevo C4 Picasso un carácter bastante innovador y bastante poderoso.


Curiosamente parece más pequeño que la generación anterior y su planta lateral es la de un monovolumen más compacto. De hecho, utiliza la misma plataforma global que incorporarán otros modelos del grupo PSA, como el también inminente Peugeot 308, denominada EMP2. Esta plataforma permite al nuevo modelo de la marca del "chevron" ser unos 40mm más corto y aumentar la distancia entre ejes 55mm, lo que redunda en una mayor habitabilidad interior y en el aplomo y la manejabilidad de todo el conjunto en general.


También es reseñable la pérdida de peso general que ha sufrido respecto al Picasso al que sustituye; ni más ni menos que 140 Kg. Eso a sido posible gracias a la incorporación de nuevos materiales más ligeros en su proceso de fabricación, como es el caso del aluminio, aceros especiales y nuevos materiales plásticos, por lo que el monovolumen compacto de Citroën también gana en materia de agilidad de conducción y sobre todo, en materia de consumos y emisiones.


En la zaga nos vamos ha encontrar unas líneas muy compactas y equilibradas, aunque si me lo permitís, me recuerda en cierta manera a la trasera del nuevo Volkswagen GolfNo voy a pensar mal ya que, como he dicho, es una zaga muy atractiva y acorde con el resto del diseño del vehículo pero, ¿no se habrán inspirado demasiado en un super-ventas como el Golf para arañar algún tipo de cliente despistado?.


El portón de carga de acceso al maletero es muy amplio y la boca está a muy buena altura respecto al suelo para que no rengamos que hacer más esfuerzo del necesario. Además, a pesar de su apariencia compacta, puede cubicar la impresionante cifra de 537 litros, a los que hay que sumar otros 40 litros más entre todos los huecos y guanteras que hay repartidos por todo el habitáculo. Como veis es un coche con una clara vocación familiar.


Una vez en el interior, lo que más llama la atención, y que ya empieza a ser una seña de identidad entre todos los vehículos del grupo francés, es la gran luminosidad del habitáculo. El amplio parabrisas que se extiende de forma continua sobre nuestras cabezas hasta una superficie acristalada de 5,34 m2 como máximo, proporciona una visibilidad realmente impresionante para el conductor y una panorámica espectacular al resto de pasajeros. Los pilares delanteros también son ahora más estrechos y favorecen una mayor visibilidad en curva al conductor.


El puesto de conducción es realmente cómodo y tan solo una guantera que existe debajo del volante y que molesta un poco al abrirla, tiñe un poco de negro el impecable historial de ergonomía y confort del que siempre ha gozado el C4 Picasso. Aunque ese pequeño detalle se puede pasar por alto si montamos los asientos con función relax y masaje incluidos en el Pack Lounge.


Todos los mandos están a mano del conductor. Y cuando digo a mano, es que la mayoría están aglutinados en todo el contorno del volante, por lo que habrá que acostumbrarse a todos antes de emprender la marcha para evitar accionar el control de velocidad de crucero, cuando lo que queremos es cambiar el dial de la radio, por ejemplo. No obstante es de agradecer que hayan declinado la utilización de aquel volante extraño de anteriores modelos, en los que solo se movía el aro y la sensación del conductor no era la natural.


El salpicadero cuenta con dos pantallas centrales, una de ellas táctil. La más accesible de 7" sirve para controlar el sistema de climatización, el equipo de música, la navegación y las ayudas a la conducción y la principal de 12", hace las funciones de instrumentación y relojes.


El fondo de ésta es totalmente personalizable y podemos poner cualquier imagen que nos guste, además de que podemos contar con la aplicación "Multicity connect" que nos muestra, en tiempo real, información valiosa sobre hoteles más cercanos o gasolineras, por poner un ejemplo. El equipamiento con el que podemos contar puede ser muy nutrido y además, podemos incorporar elementos y asistentes a la conducción, hasta hace bien poco, impensables en vehículos de esta categoría.


Entre la batería de opciones y la dotación de serie, según equipamientos, podemos tener "gadgets" como sistema de visión periférica, control de velocidad de crucero adaptativo, arranque por botón sin llave, navegador, asientos calefactados, tapicería de cuero, climatizador bi-zona, asistente de arranque en cuestas, avisador de cambio involuntarios de carril, sensor de luces y de lluvia, sensores de aparcamiento, lunas traseras tintadas...


Las mecánicas entre las que podemos elegir, son las ya conocidas en otros modelos de la marca de gasolina y las más laureadas mecánicas diésel. Entre las primeras contamos con el VTi 120, con 120cv y el más enérgico 1.6 THP de 155cv y entre los propulsores de ciclo diésel podemos elegir entre tres HDi con dos gamas de potencia; 92 y 115cv. El e-HDi de 92cv goza de unos consumos más ajustados debido a las soluciones especificas empleadas por la marca y gracias a la nueva caja de cambios manual robotizada de 6 relaciones. También presume de ser el primer monovolumen que emite menos de 100 g/km de CO2. El resto de la gama puede montar cajas de cambio manuales de 5 o 6 relaciones y la ETG6 robotizada también se puede montar en el turbodiésel más potente de 115cv.


Como os he comentado anteriormente, el nuevo C4 Picasso es ahora más dinámico y ágil que su predecesor, en parte, por el nuevo chasis global de la marca, así como por la dieta a la que ha sido sometido. La dirección asistida es muy directa y su diámetro de giro se ve favorecido por un volante un poco más pequeño que la media. Las suspensiones también ofrecen un buen compromiso entre comodidad y firmeza, que no compromete para nada el confort interior y merma los cabeceos de una carrocería sobreelevada, ofreciendo un gran aplomo en un amplio espectro de curvas.


La gama de precios arranca desde los 20.500 euros hasta los casi 30.000 de la versión más equipada, lo que situará al monovolumen más vendido de Citroën, otra vez entre los mejores y con una imagen más actualizada y atractiva.


Si tuviera la necesidad de comprarme un monovolumen compacto, el nuevo C4 Picasso sería una opción que tendría muy en cuenta ya que me parece muy atractivo visualmente y uno de los mejores del segmento en habitabilidad, confort, y relación calidad-precio, amén de sus contrastados motores HDi.


Pero probablemente declinaría la balanza a su favor no sólo por lo que acabo de comentaros, sino porque se fabrica en la planta que la marca tiene de Vigo en exclusiva para todo el mundo, así que lo que es bueno para España, quiero pensar que también me repercutirá a mí en un futuro.

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