Citroën DS3 Cabrio. Open air

El Citroën DS3 se presentó hace ya unos tres años como alternativa a los Mini y Fiat 500 y se han vendido como churros. De hecho, la gama DS de Citroën supone el 10% de las ventas totales de la marca, así que, ¿por qué no aprovechar el filón y seguir sacando a la venta nuevas versiones?.

En esta ocasión vamos ha hablar del Citroën DS3 Cabrio, que mantiene todas las aptitudes y el amplio abanico de posibilidades de personalización de la versión cerrada pero que, además, viene con algunos elementos diferenciadores exclusivos.

Los chicos de la factoría francesa han optado por mantener la solución que ya existía en el peculiar Citroën C3 Pluriel y bastante similar a lo que conocemos en la variante cabrio del Fiat/Abarth 500.

Mantienen los largueros superiores y la capota de lona se desliza sobre ellos hasta convertirlo en un cabrio, pero sin los inconvenientes del C3 Pluriel en el que, además, se podían quitar esos largueros con el problema de que había que dejarlos guardados en el garaje y si llovía, obviamente, te empapabas. De esa manera mantienen fielmente el mismo estilo de diseño, con el techo "flotante" y esa distintiva aleta de tiburón. 

Por supuesto, ni que decir tiene que los refuerzos estructurales que deben aplicarse a los cabrios con respecto a sus versiones cerradas y que aumentan el peso considerablemente, en este caso, se han visto reducidos a una expresión mínima y tan solo "engorda" 25 Kg, por lo que el dinamismo en la conducción no se ve afectado para nada.

Por lo demás, es el mismo concepto. Un atractivo utilitario, con aires muy dinámicos y altamente personalizable; el color de los retrovisores, los guarnecidos interiores, diferentes vinilos decorativos, las llantas... De hecho, el techo de lona también se puede "tunear" y se puede elegir entre las tres opciones disponibles: Negro, Azul Infini y Graphique DS.

Ese techo, se puede abrir eléctricamente incluso a velocidades de hasta 120 Km/h y también cuenta con tres posiciones de apertura; intermedia, apertura horizontal y apertura total. Se repliega en su totalidad en 16 segundos y se puede detener en cualquier punto que deseemos gracias al mando situado en el panel superior, que también cuenta con sendas luces de cortesía iluminadas por LED. Cuenta con un deflector que evita las turbulencias en la medida de lo posible, pero en una carrocería de techo descubierto es una cosa inevitable a partir de ciertas velocidades. Con el techo cerrado, también se escuchan ligeros silbidos aerodinámicos, pero nada que moleste o que se pueda camuflar subiendo el volumen del equipo de sonido.

Una de las consecuencias de ser cabrio es que, aunque los pasajeros viajen cómodamente en su interior, sí que es cierto que ha perdido algo de capacidad del maletero, concretamente 40 litros, quedándose ahora en 245 litros de capacidad, que tampoco están nada mal. También han tenido que rediseñar la tapa del maletero que, en esta ocasión, bascula hacia arriba y nos descubre una boca de carga bastante angosta, incluso es un inconveniente mirar por el retrovisor interior cuando la capota está plegada en la parte trasera, ya que no veremos ni un carajo. Pero es lo que tiene el diseño y el tener el placer de circular a cielo abierto. Otra de las peculiaridades e innovaciones del DS3 Cabrio, también tienen que ver con la zaga, ya que esta versión estrena unos pilotos con tecnología 3D, muy bonitos y originales.

En el interior no nos encontraremos con cambios sustanciales, ni con apenas nada que distinga la versión cabrio de una cerrada, a excepción del panel en el techo que abre la capota.

Los motores a los que podrás optar si te decides por la compra de este utilitario exclusivo son cuatro; un 1.2 VTI con 82cv, un 1.6 VTI con 120cv y un 1.6 THP con 155cv, todos de gasolina y también habrá una versión diésel 1.6 e-HDI con 92cv y unos consumos frugales de 3,6 l/100 Km en ciclo mixto y puede alcanzar una velocidad punta de 175 Km/h.

En el apartado dinámico no pierde ni un ápice de calidad de rodadura y el incremento de peso no se deja notar en las zonas más reviradas. Sigue siendo un coche muy "ratonero" y con un gran aplomo en vías nacionales. La dirección transmite fielmente lo que pasa debajo de las ruedas y el cambio de seis relaciones tiene un accionamiento muy bueno.

Los precios en el mercado serán de entre 2.000 a 3.500 euros por encima de la misma versión con carrocería cerrada, así que por aproximadamente 21.000 euros podrás empezar a adquirir un poco de exclusividad, mezclado con un poco de personalidad y bastante descaro.